Sobre suelos ácidos y en zonas con cierta humedad aparece el rebollo o roble melojo (Quercus pyrenaica).
Se trata de un roble marcescente, es decir, hoja que se seca en invierno pero que permanece en el árbol largo tiempo antes de caer.
Son productores de numerosas especies destacando los boletus, incluyendo el de verano o reticulado y el negro, el huevo de rey así como rebozuelos.